Taylor Swift se ha comprado una nueva casa en el barrio newyorkino de Tribeca, una de las zonas más exclusivas de la ciudad donde la cantante ya tenía una vivienda. De hecho se la ha comprado al lado de su antiguo ático, aunque no sabemos el propósito.
La vivienda tiene 1.500 metros cuadrados y están divididos en tres plantas.
En la inferior se encuentra el centro de relax y entretenimiento: un cine, una zona de baños de vapor, un bar y un gimnasio.
En la segunda planta se encuentra el salón con una gran claraboya de cristal que ilumina toda la estancia, un apartamento de invitados con entrada privada y una terraza con barbacoa, algo que en la ciudad de los rascacielos es muy difícil de encontrar. Además en esta planta se encuentra una cocina dotada con los mejores electrodomésticos.
En la última planta se encuentra la suit principal, otras habitaciones y baños y un segundo bar para no tener que estar escaleras arriba, escaleras abajo.
Pero lo más curioso de esta casa es su anterior inquilino. En esta vivienda cumplió arresto domiciliario Dominique Strauss-Kahn tras la acusación de abusos sexuales por parte de la empleada de un hotel.
Bueno, vemos que Tay se está haciendo con una buena cartera inmobiliaria, porque no es la primera vez que hablamos de sus casas en Rodhe Island o Beberly Hills